01/11/2016 Literatura 0

En el ritual mortuorio anual en un pueblo berciano típico: Toral de Merayo.
Me encantan estas tumbas tan tradicionales en tierra, decoradas con flores caseras.

“La noche se entraba,
el sol se había puesto:
perdido en la sombra
yo pensé un momento:
Dios mío, qué solos
se quedan los muertos”.

Gustavo Adolfo Bécquer

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